Estar con ustedes
es comprobarse gestos y miradas que uno
ya no comparte
pero que ustedes reivindican. .
Tal vez no importe mucho haber perdido tanto
si aún me quedan los rincones de vuestra casa,
de vuestra piel, de vuestro cariño.
Para yirar a gusto en medio de tanto amor,
con ustedes, algo de lo que no me queda duele menos
y algo de lo que extraño me acompaña.
Ustedes - ¡ oh, ustedes ! -
son mi alternativa de ladrón desesperado
que se robó su propia vida
y huyendo, acorralado,
halla de pronto el callejón amable,
al oasis de lujo de dos seres con alas,
dueños de abecedarios que alivian la sed
y de miradas que comprenden y contienen
cuánto.
Desde aquí, con ustedes,
no importan mas las calles cortas,
ni el tiempo que reste para estar. .
Aún si debo partir,
mucho de mí se quedará en ustedes,
con ustedes,
por ustedes,
por mí,
entre ustedes. .
.
Mario Iaquinandi
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